"Voluntariomanía"

¿Qué dinámicas logra que un grupo de personas se esfuerce para levantar fondos invirtiéndolos en actividades, obras o trabajos que beneficiarán a otros?  ¿Puede ser que esto sea parte de "la locura del evangelio", aparte del escándalo de la cruz? (1 Cor. 1:18).

Movilizar 40 personas para que dejen su casa, su trabajo, su país, su cultura, llevándolos a un contexto bastante precario e incómodo (hospedarse en casas ajenas, dormir en delgadas colchonetas en el piso de templos y salones, turnos para la ducha que pueden durar hasta dos horas y trabajar de sol a sol), puede ser visto como algo impensable o un desperdicio de tiempo y esfuerzo.  Sin embargo, hay una motivación que viene de una convicción que tiene relación más con la voluntad que con las emociones.  La voluntad de querer agradar a quien nos reclutó como soldados, la alegría de ver a otros creciendo y mejorando su forma de vida es un móvil y acicate más que suficiente para brindar horas, días y semanas en beneficio de otras personas.  Este es el único retorno: ver gente bendecida cumpliendo el propósito de Dios en sus vidas.

Voluntarios de Argentina el día de su llegada a la base de LETRA

Este tipo de recepción de voluntarios se ha convertido para LETRA Paraguay en un elemento común los últimos diez años.  Hay mucha gente que busca activar y bendecir en proyectos que beneficien a los más desprotegidos o a segmentos de personas de los que muy poca gente se ocupa.  Hemos sido testigos de una especie de "voluntariomanía" en gente de distintas culturas disfrutando trabajar por los demás.

La construcción de una base de traducción bíblica que beneficie con la Palabra, con programas de alfabetización, uso de Escrituras y proyectos sociales, atrae gente como esta: dispuesta a dar de sí misma con alegría y sencillez de corazón, con esfuerzo y negación de sí mismos, con la convicción que el Señor no sólo bendecirá a los pueblos nativos de Paraguay, sino también a ellos mismos, pues este tipo de ejercicio compasivo los llena de realización y los hace más humanos, al acercarse a aquellos que menos tienen.

Hermanos y hermanas voluntarios/as argentinos/as que esta semana están en la base de Luque, Paraguay, y hermanos y hermanas "voluntariomaníacos" que alguna vez nos acompañaron en Naranjal o en alguna comunidad indígena de región oriental u occidental, que el Señor los recompense y les de cien veces más de lo que Uds. hoy están dando con los brazos abiertos!